El presidente de La Liga, Javier Tebas, ha defendido la decisión de organizar el partido entre Villarreal y Barcelona en Miami en diciembre, calificándolo como un movimiento impulsado por los aficionados, clubes y jugadores. Ante las críticas del Real Madrid y otros, Tebas desestimó la oposición, argumentando que la exposición global es vital para el fútbol español, mientras insiste en que el partido preserva la integridad de la competición y beneficia a los aficionados internacionales.