Después del trepidante empate 4 a 4 en el encuentro de ida disputado en Cataluña, Atlético de Madrid y Barcelona se medirán este miércoles a las 16.30 (transmitirá Flow) en el Estadio Metropolitano de la capital española en la revancha de una de las semifinales de la Copa del Rey. El ganador de esta serie chocará en el encuentro decisivo con Real Madrid, que el martes eliminó a Real Sociedad.
El partido de ida, disputado el 25 de febrero en el Estadi Olímpic Lluís Companys de la Ciudad Condal, fue una montaña rusa: el conjunto dirigido por Diego Simeone tomó ventaja de 2 a 0 (uno de esos tantos lo anotó Julián Álvarez), el Barça se recuperó y pasó al frente 4 a 2, pero la visita terminó igualando con un gol del noruego Alexander Sørloth en el tercer minuto agregado del segundo período.
Esta vez no habrá lugar para la paridad. Si el duelo termina empatado después de los 90 minutos, se jugará un tiempo extra de media hora, como sucedió el martes en el Santiago Bernabéu en el cruce entre Real Madrid y Real Sociedad. Si la igualdad no se rompe, el pasaje a la final se resolverá con remates desde el punto penal.
La presión es grande para el Atlético. Eliminado de la Champions League en los octavos de final y relegado al tercer puesto en la Liga de España, su única oportunidad para conseguir un título (el último fue la Liga en la temporada 2020/21) es esta Copa del Rey, un certamen que no obtiene desde 2013, cuando el equipo que ya dirigía Simeone batió 2 a 1 a Real Madrid en el Bernabéu.
Para colmo, el Colchonero no llega en su momento más virtuoso de la temporada: solo ganó uno de sus últimos cinco partidos y apenas tres de los últimos 10. La recuperación deberá producirse en una situación límite y frente a un rival con el que ya se midió tres veces en esta campaña, con suerte dispar: además del 4 a 4 en la ida de esta llave, se impuso 2 a 1 en Cataluña el 21 de diciembre y cayó 4 a 2 en Madrid el 16 de marzo, ambos por la Liga.
En el elenco local serán titulares Juan Musso, Rodrigo De Paul, Giuliano Simeone y Julián Álvarez (máximo anotador del equipo en la temporada, con 23 tantos), mientras que Nahuel Molina disputa un lugar en el lateral derecho con César Azpilicueta. Esa es una de las tres incógnitas en la alineación de Simeone. Las otras dos son Javi Galán o Reinildo Mandava en el lateral izquierdo y Pablo Barrios o Conor Gallagher en el medio. Ángel Correa se perderá el duelo por estar suspendido.
Barcelona es, en estos días, la contracara del Atlético: lidera la Liga, espera a Borussia Dortmund en los cuartos de final de la Champions, encadena 20 partidos sin perder y aspira a llegar a la final de la Copa del Rey, una instancia que no disputa desde 2021 (batió 4 a 0 al Athletic Club de Bilbao en Sevilla).
El técnico de los blaugranas, el alemán Hansi Flick, estuvo dosificando esfuerzos desde que sus jugadores regresaron del último parate impuesto por los compromisos de los seleccionados nacionales. Así, Raphinha, jugador fundamental para el equipo esta temporada con 27 goles y 20 asistencias, no disputó siquiera un minuto desde que volvió de la convocatoria con el combinado brasileño, mientras que el central Pau Cubarsí, quien regresó antes de tiempo de la concentración con la selección española por un esguince de tobillo, solo participó unos minutos el domingo en la goleada 4 a 1 ante Girona.
Por su parte, el polaco Robert Lewandowski (38 goles en la temporada) solo jugó 22 minutos ante Osasuna el jueves pasado y otros titulares habituales. el lateral Alejandro Balde y el mediocampista Frenkie de Jong, empezaron en el banco ante Girona. Ellos tres, además de Raphinha y Cubarsí, estarán desde el inicio este miércoles en el Metropolitano. En cambio, el delantero Dani Olmo faltará por una lesión muscular.